COMO MANIPULAN A LA GENTE
Por Hugo Castillo Mesino
Al leer las “Diez estrategias de manipulación mediática” que plantea Noam Chomsky, corresponde prestar atención a lo que viene ocurriendo en el país y en otras partes del orbe y pensar en los hechos más trascendentales inscritos en los conflictos bélicos, en las crisis financieras, empresas estatales, elecciones presidenciales, golpes de Estado, implementación de leyes y todas las estratagemas que desarrollan quienes ostentan el poder, cuya tarea central es distraer o entretener a los ciudadanos valiéndose de su llenura e ignorancia; hasta el extremo que estos mismos ciudadanos son los que terminan reproduciendo su propia manipulación de la cual han sido objetos o blancos fáciles de los actores manipuladores mediáticos dotados de herramientas y plataformas de la comunicación en todos los niveles, asimilando con ingeniosa facilidad como crear cortinas de humo, reeditando informaciones deformadas, convirtiendo al ciudadano de victima a victimario e inclusive predicen las demandas sociales sosteniendo que estas son creadas por la propia gente.
Nos asalta una preocupación desbordada al informarnos cómo las elites políticas regionales, nacionales y locales en los gobiernos y sus aliadas empresas de comunicación juegan a diario con la gente convirtiendo las verdades en mentiras y las mentiras en verdades. Las estrategias de manipulación mediática sustentadas por Chomsky guardan una secuenciación con los contextos para su comprensión, veamos: las estrategias son conceptos y corresponden a una visión de método de control social que se utiliza para desviar la atención de los problemas importantes generados por las elites económicas y políticas mediante la saturación de informaciones insignificantes, impidiéndole a la gente que conozca, para ello se vale de las ciencias en la aplicación de estas estrategias alternando con empresas comunicativas como RCN, CARACOL, Blu Radio, CNN y otros medios locales que crean plataformas y programas como realitys, concursos, telenovelas, que distraen ante el aumento pírrico del salario mínimo que afecta a la mayoría de la gente. Estas mismas elites asimilan la estrategia de “crear problemas y después ofrecer soluciones”, conocida como “problema-reacción-solución”, traducida en que los gobiernos dejan que los problemas de seguridad, educación, vivienda, etc., se acrecienten para que sea la misma gente la que interponga acciones para solucionar estas demandas sociales y buscar nuevos operadores en los servicios públicos que terminan privatizados. La “estrategia de la gradualidad”, consistente en que la gente termina aceptando una medida lesiva producto de una política neoliberal gradual al privatizar y aumentar los impuestos a cuentagotas para que la gente no reaccione y adverse la medida terminando conforme, aduciendo que lo privado es mejor.
La estrategia denominada “diferir como una manera de aceptar una decisión impopular”, consiste en maquillar como “dolorosa y necesaria” la proliferación de cámaras de seguridad y de vigilancia o alcabalas en las vías que acosan a conductores y a ciudadanos hackeándolos por todas las ciudades del país. La estrategia “dirigirse al público como criaturas de poca edad”, se aplica en la publicidad hacia la gente utilizando argumentos infantiles, expresados con debilidad para ser atractivos en su consumo, como por ejemplo las reformas laborales que garantizan la creación masiva de empleos y bienestar social que termina favoreciendo a los grandes empresarios. Cuando la emoción está por delante es porque la razón esta vacaciones, en esta estrategia “prevalece el aspecto emocional más que la reflexión”, como sucedió con el Plebiscito que le abrió la puerta a los devoradores del Proceso de Paz dándole acceso al inconsciente de sus detractores para implantar o injertar ideas, deseos, miedos, temores, compulsiones o inducir comportamientos dogmáticos como ceguera ciudadana, tildando los Acuerdos como una gestación del “castrochavismo”.
Ahora el “hombre mediocre” de José Ingenieros parece instalado en la estrategia de “mantener un público en la ignorancia y la mediocridad”, lo cual permite convertir al público en incapaz de comprender los métodos y la tecnología que los controla y los esclaviza, algo así como la educación discriminada que se le imparte a las clases pudientes y a las marginadas, donde a los pobres se les habla con sencillez para que acepten todo. “Estimular al público a ser complaciente con la mediocridad” y que es un esnobismo o moda ser estúpido e inculto: si tiene dinero cásate con él, no importa donde lo obtuvo, dejándose arrastrar por las telenovelas impulsadas por las cadenas de televisión alienante. La estrategia del “oráculo estatal”, que le dice a la gente que es responsable de su propia desgracia, con esto se llega a reforzar la “auto-culpabilidad”; por lo tanto, no tiene que culpar a las instituciones y elites de gobierno porque tú eres tu propio destino.
“Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismo se conocen”, es la estrategia con la que los gobiernos opresores han hecho carrera para moldear los estereotipos ciudadanos y con ellos controlar a los individuos, ya sea para engañar, convencer y someter a la gente; estos estudios los realizan las empresas con equipos especializados en asuntos poblacionales, los cuales calculan la reacción de la gente hasta pacificarla y masificarla amorfamente.
PUBLICADO EN EL DIARIO LA LIBERTAD DE BARRANQUILLA
DOMINGO 21 DE MAYO 2017
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