FACEBOOK LIVE

Latest Posts:

DIALÓGICA Y PAZ

DIALÓGICA Y PAZ


Por Hugo Castillo Mesino

Cada vez que se quiere contestar una pregunta, la dificultad principal está en saber cuándo se tiene la respuesta: ante esta circunstancia siento la necesidad de ser preclaro y vuelvo a preguntarme en qué país vivimos, qué país anhelamos y soñamos; sin embargo, me desvela  y me asalta el interrogante que deseo compartir con ustedes, el cual lanzo desde mis bucles mentales: ¿Son indispensables los medios de comunicación para ejercitar la ciudadanía democrática? Serían muchas las respuestas que saldrían a flote sin pretender caer en un análisis estricto; es ahí donde afloran y se configuran los espacios públicos, virtuales u otros, en el que los ciudadanos reciben informaciones y se enteran de los chismes o cotilleos, rumores, cuando asisten, participan o escuchan y hacen sus lecturas sobre eventos de naturaleza política social y cultural.


Estas informaciones se reeditan y se transmiten en programas acartonados por tecnócratas de la información, antecedidos  de una dosis de manipulación estratégica agenciada por los canales televisivos, la prensa hablada y escrita cuando difunden sus titulares, transmiten los debates e "informan" sobre las polémicas con temáticas de corte nacional, regional y local en las que participan  las instituciones del Estado, instituciones privadas, organizaciones, movimientos sociales, la sociedad civil, dignidades y dirigentes políticos. Ante lo expresado sabemos que no hay medios de comunicación perfectamente neutrales y objetivos; muchos de ellos toman partido de acuerdo con sus intereses corporativos y con las relaciones marcadas de gobierno. Es necesario darnos a la tarea de aprender a buscar la  información recurrente, fiable, que nos permita hacer un análisis de lo qué significa y dignifica a la Nación, como son los diálogos que se desarrollan en La Habana (Cuba) entre el Gobierno y la FARC, las Victimas y los Victimarios.
No se requiere hacer un esfuerzo mental para compilar algunos criterios y posiciones que se difunden  a través de los medios de comunicación y que son secundados por sectores retardatarios, vetustos, demenciales y por bufones identificados como enemigos del proceso de paz, quienes niegan la relación dialógica como iguales en la Mesa entre la Insurgencia y el Gobierno; además, señalan como inconcebible la relación dialógica entre víctimas y victimarios estigmatizándola con calificativos deshumanizantes; a lo cual se agrega la actitud descomedida del Ministerio de Defensa al deformar el papel de los desmovilizados especulando sobre su conversión en criminales que atentarían contra el bienestar de la comunidad una vez se reinserten. Esto es, sin duda, un atentado al proceso de diálogo.
Es mágico y aventurero  el discernir sobre temáticas trascendentales en este país cuando éstas tocan los hilos de la incertidumbre y la esperanza del tejido social, pero como estamos llenos de humanidad nos atrevemos a pensar y a lenguajear sobre los diálogos entre la Insurgencia de las FARC, el Gobierno y las Sociedad Civil, los cuales deben caracterizarse por la puesta en común de la "discusión experta" que incorpora técnicas y dispositivos de diálogos, tal como lo define Peter Senge en su compendio "La quinta disciplina en la práctica": "A veces basta con ponerse de acuerdo sobre el origen del desacuerdo para comprender mejor la situación, aclarar los supuestos que antes pasaban inadvertidos y continuar avanzando". Este es el espíritu que debe predominar en los diálogos de  La Habana por construir una nueva realidad entre todos. Bien acierta el profesor chileno Humberto Maturana en su libro "El sentido de lo humano", cuando nos dice: "El conversar es un modo particular de vivir juntos, en ese espacio relacional uno puede vivir en la exigencia o en la armonía con los otros”. Lo que anhelamos es la transformación en la convivencia para poder garantizar más adelante una paz verdadera y estable.
Sé con precisión que somos administradores del tiempo relativo, para ello me corresponde enunciar que el objetivo no es –no debe ser– conseguir una opinión pública sólida, sino una mejor opinión personal suficientemente fundada y argumentada sobre lo que acontece en la Mesa de Concertación y de Diálogo en La Habana entre los Interlocutores activos de facto y los del Gobierno, tal como lo corrobora Fernando Savater en su "Diccionario del ciudadano sin miedo a saber", cuando emula a Hannah Arendt quien distingue entre ambas opiniones lo siguiente: "La llamada opinión publica tiene siempre algo avasallador y hasta totalizante", es aquí donde los ciudadanos tienen el miedo a la discrepancia y la aceptan como autómatas; mientras que la "opinión personal es la señal distintiva del ciudadano maduro, es decir, de quien lucha contra la ignorancia que coarta nuestra libertad"; lo importante es que el ciudadano sea original. Para que el diálogo no se convierta en un círculo vicioso, el Gobierno tiene un compromiso consistente en promover que la labor ética de los medios de comunicación sea la de mantener informada a la ciudadanía sobre el acontecer político de los diálogos, con objetividad sobre los aspectos de convergencia y divergencias entre las partes del conflicto, sin mutilaciones y tergiversaciones, máxime cuando se debe dialogar entre iguales, que es la esencia fundamental de todo diálogo; por tanto, los medios de comunicación no deben inclinar la balanza a su libre albedrio, negando el principio de la otredad, como si el otro no existiera; los diálogos son para participar y mantener informada a la Nación con sus nacionales y no al servicio de la empresa mediática que con sus agentes y su empoderamiento convierten a las mentiras en verdades de tanto repetirlas, truncando el proceso que se adelanta en La Habana, salvo en algunos casos, como si los puntos de los acuerdos fueran patrimonio de su libertad de empresa.
Lo importante es procurar por llegar a saber por cuenta propia y no acumular saberes ajenos acríticamente aceptados que nos condenen. De lo que se trata es de liberarnos para pensar por nosotros mismos, donde la relación dialógica de los sectores  en conflicto sea el insumo fundacional para la paz.
PUBLICADO EN EL DIARIO LA LIBERTAD DE BARRANQUILLA
DOMINGO 14 DE SEPTIEMBRE DE 2014
Share on Google Plus

About hugo castillo

This is a short description in the author block about the author. You edit it by entering text in the "Biographical Info" field in the user admin panel.
    Blogger Comment
    Facebook Comment

0 comentarios:

Publicar un comentario