FACEBOOK LIVE

Latest Posts:

LA IDEOLOGÍA EN LOS SERVICIOS PÚBLICOS

LA IDEOLOGÍA EN LOS SERVICIOS PÚBLICOS

Por Hugo Castillo Mesino

Solemos considerar a los administradores como simples herramientas teóricamente neutras que se sujetan a voluntades políticas. Con esto estamos dejando a un lado el verdadero funcionamiento de las instituciones políticas, lo cual se constituye en un grave error. Las instituciones políticas giran en dos direcciones: la primera puede ser la burocracia ociosa que expresa un aspecto negativo con grandes repercusiones nefastas para la ciudadanía y la segunda es la burocracia funcional que se manifiesta con un enfoque positivo y tiende a identificarse con la ingeniería institucional, ¿Por qué asombrarnos que un secretario del despacho se sienta mas cercano de los contratistas que de los empleados o ciudadanos?, ¿de que una autoridad piense sobre todo más en su reelección que en la vocación de poder para servirle a la comunidad?, ¿ de qué un funcionario publico le de prioridad a su jefe antes que cooperar con otros servicios afines?, ¿ de qué en sociedades como la nuestra los altos funcionarios  nacionales y distritales se inclinen menos por el respeto de lo público que por la corrupción  o por el clientelismo manifiesto en la contratación pública?, ¿cómo se explica que un servicio público financia a nivel nacional, departamental, distrital y municipal los debates públicos  electorales; pagando las redes humanas que allí se forman?

Definimos a la ingeniería institucional como el arte de concebir a las instituciones cuya “lógica profunda” vaya en el mismo sentido que los objetivos perseguidos; para ello es determinante transitar por los conceptos, las estructuras, las culturas, los procedimientos, los recursos humanos y los modos de evaluación de las instituciones públicas. Somos coherentes cuando hablamos de la ideología de los servicios públicos dado que todo cuerpo social necesita una ideología que le de cohesión, sentido, valores y puntos de referencia. Desde nuestra condición de maestros, pasando por los ciudadanos, los agentes del orden, los gobiernos de toda naturaleza, los representantes de la salud, los militares, las secretarias, los despachos se hace necesaria una gobernanza para la sociedad que implica preservación y desarrollo a largo plazo y por ende una gestión de tiempo o una decisión de “Gobernar es escoger” que permita forjar una ideología de los servicios públicos. Para que esto sea posible se necesita elaborar con los demás medios profesionales una “Carta de Responsabilidades Humanas” creando círculos de discusión local, regional y nacional, estos círculos de debates tendrían que ser comunes a los distintos tipos de función publica y los diversos sectores de la acción pública.

La ideología del servicio público con su “Carta de Responsabilidades Humanas” contribuye a que el servicio público y por ende el funcionario público baje de su pedestal; de esta forma los gobiernos territoriales y el propio Estado no estaría por encima de la sociedad, por el contrario, se convierte en interlocutor de los otros actores sociales para lograr alcanzar los objetivos de interés de las comunidades participando con el principio de la subsidiariedad. Lo que más adelante permitiría no encasillarse y realizar actividades de la función pública de manera sectorial, sino construir las relaciones, manejar los diálogos, construir proyectos y compartir responsabilidades. La carta de responsabilidades se elabora con la visión de educar a la comunidad en asocio con los funcionarios públicos para que no se impongan las voluntades clientelistas quienes piensan más en el pago del servicio que en la comunidad refiriéndonos a los gobernadores, alcaldes y secretarios del despacho haciéndolo extensivo a los entes territoriales.


La estructura de la cultura administrativa en los entes territoriales son verticales con cadenas jerárquicas largas; de lo que se trata es de darle un manejo horizontal a los servicios públicos que se ofertan a la ciudadanía con sentido pedagógico y humano y NO donde prevalece la condición de sancionar, perseguir y cobrarle a los usuarios como sucede con el servicio que prestan las Secretarias de Movilidad y el espíritu inquisidor de las Secretarias de Impuestos con el cobro del Predial  y Valorización en el distrito de Barranquilla y la asfixia de políticas publicas con el ADN del embargo de los inmuebles sobre la justificación de un falso desarrollo. Para crear estructuras y culturas capaces de manejar los desafíos entre los niveles de gobernanza no se requiere romper las estructuras; de lo que se trata es de invertir en la forma de manejar o funcionar que fortalezca la relación horizontal ciudadana en detrimento de la relación vertical. No podemos implementar una ideología en los servicios públicos sino llevamos una revolución conceptual, cultural e intelectual donde los recursos humanos sean el centro de la estrategia de cambio y esto es factible creando talleres de reflexión transversal en los diferentes tipos de administración para buscar juntos las soluciones. La función pública hay que ejércela orientada a mantener la moral pública donde sobresalen los ciudadanos y estos deben ser honrados con políticas públicas filantrópicas; de esta forma Repensemos a Barranquilla. 

PUBLICADO EN EL DIARIO LA LIBERTAD DE BARRANQUILLA

DOMINGO 13 DE ENERO DE 2019
Share on Google Plus

About hugo castillo

This is a short description in the author block about the author. You edit it by entering text in the "Biographical Info" field in the user admin panel.
    Blogger Comment
    Facebook Comment

0 comentarios:

Publicar un comentario