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LOS FANTASMAS DEL ESCRITOR

                             LOS FANTASMAS DEL ESCRITOR




Por Hugo Castillo Mesino


La vida de los grandes escritores adentró a la periodista Rosa Montero, a evolucionar sus neuronas y condensarlas en su obra “El peligro de estar cuerda” en la que desboca su imaginación entre el ensayo y la ficción, nos pone un espejo delante y defiende a ultranza el valor diferente y por qué no a ser diferente entre los diferentes o sea a ser rarunos, aunque si algunos más que otros. ¿Qué te sugiere esta frase?, "La única diferencia entre el cuerdo y el loco es que el cuerdo sabe que está loco” En su obra estar loco es sentir de algún modo que ya no pertenece a la especie humana, los escritores tienen un 50% más de posibilidades de suicidarse que la población en general, para Montero todos somos iguales, todos somos diferentes.

La salida creativa tiene en su origen un encuentro precoz con lo traumático, lo que implica liarse y es ahí donde aparecen los fantasmas del escritor, donde los temas y detalles se repiten una y otra vez en los libros sin que, por lo general, él o ella sea consciente; aunque las personas etiquetadas como normales cometen más actos de violencia que los lunáticos. Ray Bradbury sostiene que el ingrediente más importante es el entusiasmo, “Pues el primer deber de un escritor es su fusión: ser una criatura de fiebres y arrebatos”. La creatividad no es compleja, crear es como hacer el amor o como bailar en pareja, hay que garantizar su calidad escribiendo bien, anestesiando al yo controlador hasta encontrar los orgasmos creativos y darles comienzo a otras obras.

Es una lástima que los locos no tengan derecho a hablar sensatamente de las locuras de la gente sensata “William Shakespeare”; navegar en la vida cultural de quienes deleitan en cada palabra creatividad, misterios y verdades de mundos desconocidos como la escritora Virginia Woolf ganadora del premio Pulitzer, quien habitaba en el penoso territorio de la psicosis, terminó suicidándose. Es más, grandes escritores usaban drogas para concebir sus creaciones como Friedrich Nietzsche, adicto al cloral como sedante a base de cloroformo; Sigmund Freud y Robert Louis Stevenson a la cocaína; el síndrome de impostura del filósofo francés Louis Althusser, marxista, quien padeció de problemas mentales, empezó dándole masajes a su mujer y la estranguló;  Octavio Paz, enorme escritor  parecía ser un señor muy formal, quien dijo: “Las drogas suscitan las facultades de la analogía, ponen lo objetos en movimientos, hacen del mundo un inmenso poema de versos, rimados y ritmos.

La lista en el mundo de nebulosas literarias es interminable con los barbitúricos de Truman Capote, las anfetas de Philip k Dick, las anfetaminas de los políticos Kennedy, Churchill, y el primer ministro británico Anthony Edén; Adolfo Hitler se inyectaba metanfetamina 8 veces al dia; Jean-Paul Sartre, se la paso viendo crustáceo que lo perseguían apunta de LSD la droga que le fascinaba a Aldous Huxley; el sueco August Strinberg de condición dramaturgo,  esquizoide paranoico, se sentía perseguido por las mujeres, y terminó construyendo teorías conspirativas de una misoginia feroz.

El alcohol es la plaga mayor de los escritores durante el siglo XX. De los 9 premios nobel de literatura, norteamericanos nacidos en Estados Unidos 5 fueron desesperados alcohólicos: Upton Sinclair, C.S. Lewis, Eugene O`Neill, William Faulkner, Ernest Hemingway y otras decenas de autores. Las drogas ayudan, pero matan; François Arouet Marie conocido como Voltaire se tomaba 50 café al dia, Honoré de Balzac 40 y Gustave Flaubert combinaba decenas de ellos con vasos de agua helada.

El colombiano Hector Abad en su reflexión plantea la asociación y disociación al pensar “Mi fantasía es que vivo dos vidas: esta que estoy viendo, la caliente y otra que voy imaginando, que no es pasado ni futuro, sino un presente distinto. La vida que escribo”; quién no ha deseado escaparse del encierro de la propia vida, qué se siente al ser otro distinto de uno, es uno de los motivos que incitan a escribir libros, otro es el descubrir lo que significa ser uno mismo. Picasso en su sede de comentario decía: la obra es el 1% de inspiración y el 99% de transpiración. 

Los escritores acompañan la noche como el búho en un laberinto de noctámbulos famosos, como Víctor Hugo, Francisco José de Goya, Gustave Flaubert, Arthur Rimbaud, Marcel Proust o Miguel Ángel, que pintaba toda la noche a la luz de una vela colocada sobre un casco de cartón. Agatha Christie produjo 79 novelas y 19 piezas, escribía todas las noches hasta casi el amanecer, se levantaba al mediodía. Montero en su obra “El peligro de estar cuerda” insinúa “Escribir es un milagro poderoso que, paradójicamente, nace de la impotencia, y que permite a quien este preso de sí mismo construirse una existencia lo suficientemente valida”; Charles Bukowski “Escribir es un don y una enfermedad. Me alegro de haberme contagiado”. Callar es ser cómplice de los mal llamados “lideres y lideresas”.


PUBLICADO EN EL DIARIO LA LIBERTAD DE BARRANQUILLA

LUNES 3 DE ABRIL DE 2023  
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2 comentarios:

  1. Excelente reflexión para pensar. A veces es mejor estar "locos" o hacerse los locos para no estar en este mundo presente y pensante pensando en pensamientos malos.

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  2. Excelente reflexión para pensar. A veces es mejor estar "locos" o hacerse los locos para no estar en este mundo presente y pensante pensando en pensamientos malos Maritza Esther Morales Aragón

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