LA IZQUIERDA ORNAMENTAL
La majestuosa obra periodística de Javier Cercas “No Callar” es una compilación de 746 páginas que al leer sobre ellas transitamos y repensamos mundos para discernir y escribir, que el verdadero ideólogo de la izquierda pija no es Marx, sino Maquiavelo, aunque podría serlo; dice así: “El poder se coge con la izquierda, pero se maneja con la derecha”. La izquierda llega con el maremoto de la crisis, miseria, injusticia, prepotencia de los “poderosos” y de la corrupción; pero al llegar a ser gobierno o tomar el poder, se olvidan de todo lo que combatían y empiezan a alardear con su retórica de la táctica y la estrategia, gestualidad de antisistema y de plantar cara a los poderosos; terminan doblando el espinazo ante ellos.
Lo cierto es que antes de ser gobierno se proclaman revolucionarios y maximalistas; luego se convierten en minimalista e involucionista. La izquierda antes de llegar al poder tiene solución para todos y después fracturan la sociedad, concentrando sus esfuerzos en dos bandos; al final dejan claro que es el líder de uno.
En el abecé de la política para conquistar la realidad primero hay que conquistar el lenguaje. Por eso la tarea inmediata del Pacto Histórico y de los partidos u organizaciones afines es la de desarrollar una política democrática que se tome el espacio público, desde las instituciones hasta la calle; que confronte a la oposición quien practica el statu quo a través del lenguaje de las mentiras con altoparlantes mediáticos al servicio del sector financiero, castas, clanes políticos que a diario llenan las páginas de la prensa con sus titulares infundados como la revista SEMANA gneccqueada y otros medios radiales y televisivos que pregonan que el gobierno del presidente Gustavo Petro, es una dictadura que acabó con la democracia y la libertad. Se les olvida que los depredadores del erario público, ensangrentaron la nación y ahora aspiran a ser adalid o redentores de los colombianos.
Las grandes mentiras contienen una pequeña verdad o varias. La principal que hay que resolver políticamente lo que es político, claro que la política no debió llegar nunca a los tribunales; pero el fiscal de bolsillo Francisco Barbosa y sus antecesores han hecho de los organismos que “administran” justicia su arma para desestabilizar al gobierno y seguir manteniendo la impunidad untada de corrupción, defalco, muerte, al servicio de amos y esbirros con sus acólitos; se les olvida a estos señores que la judicialización de la política es un logro de la civilización y esto significa que los “poderosos” deben responder ante la Ley.
La palabra “política” viene del griego “polis” que significa ciudad y es lo que nos pertenece a todos y por lo tanto a todos nos atañe; no entiendo que haya personas a las que no les interesa, al menos que padezcan de un egoísmo estratosférico o que sean autistas, ni tantos. Un político debería decir siempre la verdad, por lo general mesclan lo falso con lo verdadero, que es la estrategia utilizada por los agentes de la mediocracia.
Se afirma que un buen escritor es un individuo que se dedica decir lo que la gente no quiere escuchar; mientras que un político malo hace lo contrario, por ello mientras que el Pacto Histórico no se constituya en un partido o en una organización que direccione el proceso político del actual gobierno y no logre desconcentrar y descentralizar sus actos de gobierno; la oposición aprovechará y logrará imponer su lenguaje de diatribas y mentiras con resultados electorales favorables en las elecciones que se avecinan.
Preguntan: ¿O es que, en el Pacto Histórico, nadie se atreve a decirle a Gustavo Petro, presidente, que él no puede ser padre, hijo y espíritu santo?, ¿O parar la reventazón que hay entre los partidos del Pacto, candidatos y simpatizantes?, ¿Reorientar el proceso burocrático?, ¿Darle sentido al tomatodo, donde todos ponen y ganan unos pocos?, ¿Definir voceros validos por fuera de la rosca histórica?; de lo contrario la izquierda ornamental y pija, mandara el proyecto a la M… La izquierda pija se ha inventado una forma de chantaje para blindarse de los que la critican, tildándolos de reaccionarios y sectarios.
No queremos esa izquierda cínica, gestera, ornamental, en síntesis, no queremos esa izquierda pija; por el contrario, queremos una izquierda humilde y decente que se parta la cara por resolver los problemas que durante su campaña política planteo, empezando por el hombre de la calle, el desempleado, la educación en todos los niveles, las promesas a los pensionados hoy depositadas en las canecas de la basura, estímulos para los trabajadores, vivienda para los destechados, trabajo para los desempleados, Paz en los territorios, control al alto costo de la vida, regulación a las tarifas de servicios públicos y pare de contar…Urge que recuperemos la izquierda, la seriedad, el rigor, la justicia social, la solidaridad auténtica… Comunicador social periodista.
Comunicador Social Periodista.
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