LA COP16
Los colombianos estamos en sintonía con la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad tal como se realiza en la ciudad de Cali- Colombia, conocida como la “COP16”, es una oportunidad crucial para fortalecer la implementación del Marco Global de Biodiversidad; trascendental analizar y profundizar los conceptos fundantes introduciendo la pregunta que hace Juan Torres López, en su libro “Una Hoja de Ruta Para Cambiar El Mundo. Para que haya futuro” ¿Cómo construir un mundo mejor cuando se extiende la extrema derecha para evitarlo y la izquierda no sabe cómo hacerlo?
Da vergüenza no llamar las cosas por su nombre, cuando la RAE le pone nombre a las cosas en lo corporal, espiritual, abstracto, natural, artificial, concreto y virtual. El mundo debe regirse por principios, de paz, justicia, libertad, bienestar, sostenibilidad; cabe preguntarse ¿A qué ideología corresponden estos principios?, ¿Se trata de hacer cumplir la Declaración Universal de los Derechos Humanos, los Tratados Internacionales, las Constituciones de los países o atender al ideario político de los partidos e incluso los más reaccionarios en Colombia?, ¿cómo el Centro Democrático?
La mayoría de los partidos políticos en nuestro país están a espaldas de la ciudadanía, no reconocen sus derechos así lo expresa la Oposición al negar la aprobación de las reformas del Gobierno del Cambio; en detrimento de los trabajadores y campesinos del disfruté de los recursos dilapidados por clanes políticos, gobernantes apoltronados en escritorios de corrupción. Esto dejaría de ocurrir si se hubiese hecho una Revolución Copernicana “consistió en cambiar la Tierra por el Sol como centro del Universo” en nuestras sociedades y en nuestro interior deben estar orientadas por instituciones democráticas qué permitan una amplia y extensa participación en la toma de decisiones para acabar con los privilegios de las sanguijuelas del poder.
¿Podría seguirse denominado capitalismo a un mundo qué se organizará y funcionase guiado por el imperativo ciudadano, moral y político de efectivizar los principios en referencia en lugar de buscar tan sólo la ganancia y mantener el poder de unos pocos? ¿Sería socialismo? El escritor argentino Jorge Luis Borges, menciona una enciclopedia China titulada “Emporio Celestial de conocimientos benévolos que divide a los animales en categorías” como: “emperador, embalsamado, amaestrados, lechones, sirenas, fabulosos, perros sueltos, incluidos, que se agitan como locos, innumerables, dibujados con un pincel finísimo de pelo de camello, que lejos parecen moscas”.
Estas categorías reales pueden aplicarse al universo de cosas insertas en la sociedad, la política y la economía y pare de contar; lo decisivo no es ponerle nombres, se trata de conservar en paz la vida en el planeta garantizando justicia y un buen gobierno, sustento de todos sus miembros. En palabras de Borges son categorías reales o podrían existir, pero responden a una distinción realmente incongruente e inútil al expresarse que “no hay clasificación del universo que no sea arbitraria y conjetural” La primera ley universal es “Naturaleza- Sociedad” la tendencia ha sido su ruptura y el desconocimiento de su relación dialéctica. ¿Históricamente el hombre se ha olvidado que la primera especie a conservar en el planeta es él y ha sido autodestructivo?
La humanidad pasa por una fase evolutiva de suficiente madurez donde brota la conciencia no solo personal, sino extendida a los seres humanos pece que hay ineficiencia, por tanto, es imprescindible plantearnos problemas entre nuestro conocimiento y la sapiencia no solo de los individuos o grupos, sino relaciones con la naturaleza que permitan equilibrio entre los procesos biológicos y cognitivos.
Se trata de pensar en un mundo gobernado por un ser humano inteligente, amoroso y moral con conciencia de especie que sea capaz de administrar los recursos que tiene a su disposición; donde se distinga el bien del mal, preservando la vida en el planeta como se ha expresado en la “COP16” que realiza en la ciudad de Cali; experiencia histórica que debe dejar huellas indelebles en la conciencia de los colombianos y en el mundo, no solamente ahora, sino a las generaciones futuras como razón de existencia, conservación y defensa planetaria.
Los neoliberales son un simulacro en la defensa planetaria; su concepción y conciencia si es que la tienen, poseída por bienes materiales que engrosan el capital, con su individualismo y narcisismo egocentrista, lo que importa es la depredación y la ganancia; lo demás es semiótico.
(*) Comunicador Social y Periodista
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